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ANALOGÍAS

I
Hay amores con ¨ramas¨ que se elevan
dibujando caminos en el aire,
con el fatuo laurel de los que llevan
esa franca actitud, ese donaire,

que declara a voz viva que su cota
no consiente el perfil de una derrota.

II
Hay amores con ¨troncos¨ que sostienen
la blandura del nido, la incerteza
del primer plan de vuelo y que mantienen
con la luz de su fe y de su nobleza

los retoños, burlando al desaliento,
como casas seguras en el viento.

III
Hay amores con ¨rosas¨ que se ufanan,
que superan la cruz de sus espinas,
que a pesar de las rejas no amilanan
ni se dejan domar por las inquinas,

con el garbo especial de un querubín
que aletea en su espléndido jardín.

IV
Pero creo, de todos los amores
que he nombrado tratando de abarcar:
ramas altas, robustos troncos, flores…
sé de uno imposible de igualar,

que se gesta invencible en sus matrices,
* y es aquél que trasunta a las raíces.

V
* Los amores ¨raíz¨ no pueden verse…
son la fuente primera, el alimento,
el motor que no debe conocerse,
la energía esencial y el fundamento.

El origen del resto que se aviene
y el cimiento vital que lo sostiene.

VI
Las raíces detentan la ventaja
de existir sin los riesgos exteriores,
y guardarse del sol que resquebraja
a otras layas (disímiles) de amores

(que se mueren por fríos excesivos
o a merced de calores destructivos)

VII
* Los amores ¨raíz¨ todo lo abarcan,
compensando su albur de oscuridad,
y los ojos humanos no demarcan
su incontable virtud de inmensidad.

Son de pocos, un raro sortilegio,
una clara excepción y un privilegio.

VIII
Plantan armas a toda contingencia
a pesar de vivir siempre en la sombra,
son aquellos que ocultan su existencia,
son aquellos que nunca nadie nombra.

Y aún sin troncos ni ramas floreciendo,
* los amores ¨raíz¨ siguen viviendo.

¡Sabe Dios! por testigo y hacedor,
que no hay nada tenaz como ese amor…

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POEMA REDUNDANTE

¨Es mejor ser rey de tu silencio, que esclavo de tus palabras¨ William Shakespeare Mule City,  25 de junio de 1612 ______________________  I ¿Qué más debiera decir que ya no te hubiera dicho? ¿Qué más podría escribir que todo lo que te he escrito…? ¿...? Va casi un lustro, y es claro que no se ha inventado el río capaz de apagar el fuego, cuando ese fuego es divino. Que no hay tormenta ni obstáculo, pantano, muralla, sismo que logre desenraizar la fibra de este amor mío. Un árbol que mal nació intrincado y retorcido, no siempre amaina su fuerza por haber errado el tino; al contrario, más se prende, multiplicando los bríos y extendiendo sus raíces a niveles infinitos. II ¿Qué más debiera decir que ya no te hubiera dicho? ¿Qué podría sorprenderte…? ¡Con todo lo que te he escrito! ¿...? No he escatimado recursos, imágenes, cartas,  libros, sitios web, redes sociales, para mostrarte con signos, mi franca moción de entrega, mi volcán de desatinos, mi corazón en bandeja, mi vendaval

UNA EXCEPCIÓN

  Yo que a nadie denuncio. Yo que no rezo. Que no pongo las manos en el fuego. . Yo que en nada milito. Yo que no apuesto ni vida ni tesoros a ningún credo. . Yo que marcho en contrario a los supuestos. Yo que hago apología del desacierto. . Que en la lid de los héroes no aspiro a un puesto. Que si veo Molinos no los enfrento. . Que en las tierras del justo no hago cimientos. Y que olvido las líneas del padrenuestro. . Yo que escondo la mano. Y no doy el ejemplo. Y no impugno ni afirmo. Y no corro, ¡vuelo! . Que abandono en mitad de la guerra a mi ejército. Y que niego tres veces, como Pedro. . Que trafico emociones a sobreprecio. Que jamás me pronuncio ni me juego. . Que no tengo bandera. Ni conciencia. Ni méritos. Pongo el dedo en los clavos y no creo. . ¿ Y si juro que sumo ? ¡ Resto ! . ¿ Y si digo que voy ? ¡ Vengo ! . . Yo, vacía de gracia. Yo que no intento modificar el mundo, ni protegerlo, . . hubiera dado todo 《lo que no tengo》 por oír(te) decir(me) Te quiero. . . . . . . . .